Llovizna
Un niño mira por la ventanilla del auto cómo la lluvia se acomoda en las calles y veredas del barrio. La mira, sin verla. Porque su cabecita viaja lejos, y se pierde en laberintos parecidos a los de los jueguitos electrónicos, donde las ausencias no se notan por las vueltas que hace el camino.
El auto avanza hacia algún sitio al que nadie le ha preguntado si quiere ir, porque no hay opción posiblemente, o porque no lo consideraron necesario. Es que los grandes son los que eligen, deciden, hacen, deshacen, resuelven, discuten, organizan, planean, abren, cierran, y luego apagan la luz.
El cristal de la ventana es refugio de enormes gotas que se niegan a caer en el asfalto. Desde afuera parecen lágrimas. Tal vez son lágrimas. Porque no están todas aferradas a la ventanilla. Algunas se derraman enojosamente por las mejillas del niño que aún mira por la ventanilla del auto cómo un papá –cualquiera- cruza la calle de la mano de un guardapolvo blanco.
El auto avanza hacia algún sitio al que nadie le ha preguntado si quiere ir, porque no hay opción posiblemente, o porque no lo consideraron necesario. Es que los grandes son los que eligen, deciden, hacen, deshacen, resuelven, discuten, organizan, planean, abren, cierran, y luego apagan la luz.
El cristal de la ventana es refugio de enormes gotas que se niegan a caer en el asfalto. Desde afuera parecen lágrimas. Tal vez son lágrimas. Porque no están todas aferradas a la ventanilla. Algunas se derraman enojosamente por las mejillas del niño que aún mira por la ventanilla del auto cómo un papá –cualquiera- cruza la calle de la mano de un guardapolvo blanco.
10 Comments:
Estoy gratamente sorprendido por tu relato. Esta muy bien escrito.
El padre es el padre.
Que mas te puedo decir, creo que entendi todo. Y vos tambien de algun modo sos ese niño.
La imagen del guardapolvo blanco, que presencia tiene, y a la vez que metafora de la ausencia.
Celebro que lo hayas escrito, ya despegandome de tus sentires. Bien.
Un beso... con o sin paraguas?
Sin paraguas.
Gracias Max...
Porque penetraste en el texto, mas allá del texto.
Es cierto que sin estar pensando en mi al escribirlo, si me vi presnte al re-leerlo antes de publicarlo en el blog.
Yo soy esa niña, mi parte niña se conecta con el niño y lo comprende. El diálogo es permanente entre ellos.
Pero como una paradoja de la vida mi padre -no el del niño-, en esos presentimientos que los papás tienen con las hijas que preparan tortas Royal y no siempre salen bien..., desde lejos (porque está dando unas charlas en otra provincia), me llamó cuatro veces en el día para saber cómo estaba.
Fijate vos por qué posiblemente mi niña tenga tan claro la imortancia del padre presente. Realmente presente.
Mi papá no me llamó para hablar de pavadas. Cada vez que lo hizo me decía: "¿Estas bien? No me aflojés..."
¿Se entiende la diferencia?
Lo del paraguas lo dejamos allí, sin respuesta, la niña es bastante pícara, qué le vamos a hacer!
Gracias Max, y hasta prontito, si vos lo decis....
Prontito, si, y tanto que aqui estoy de nuevo.
Vi la foto otra vez y pense como no se lo dije, que burro; es una maravilla de pintura. Un bello instante capturado. Fijate como pincelan las gotas en el vidrio al distorsionar acuosamente/lagrimalmente el paisaje. No, esto no es poca cosa. No se puede soslayar.
De paso, me encanto que te hayas acordado de la torta Royal. Y si entiendo lo de tu padre.
Lo que no termino de entender, te lo iba a preguntar en mi blog pero me olvide, es acerca del numero siete que comentaste a proposito de siete perros en mi blog. Me acorde de un dialogo erudito entre dos personales de El nombre de la rosa donde se habla de simbologias y la importancia de los numeros en la biblia. Despues voy a releerlo a ver que descubro.
Bueno, basta de lata, a esta altura ya te habre cansado.
Nada mas desearte que pases un Feliz Dia de la Madre con tus hijos, que son hermosos (si, lo confieso, vi las fotos)y van a hacerte sentir bien.
Eso, nada, y mas, por supuesto.
Este beso.
Gracias Max por lo de la foto. La tomé yo misma y la elegí entre unas cuantas que tengo similares, por los motivos que dices.
El número siete... lindo tema para un post. Y lo contesto allí mientras lo armo. Claro que por la naturaleza del comentario irá a "Bello Abril". Es verdad que la Biblia toma la simbología numérica para muchos de sus relatos, tal cual lo dice el libro que mencionás.
Gracia por lo de mis tigrecitos, que son muy tiernos y que realmente me hicieron pasar un día increíble, empezando por el desayuno en la cama. Fue un día de la madre muy alegre y divertido, el clima ayudó...
Besos,
Abril
Verdaderamente precioso todo en un día de lluvia, en un momento y qué momento tan bonito.
... es que los grandes son los que eligen, deciden, hacen, deshacen, resuelven...
Me encanta esa frase, que bello.
Gracias desde Sevilla por leerme Abril, un gran abrazo.
Gracias a ti, Maik
Hola ABRIL, Le paso algo a tu otro blog, Bello Abril?
Esta en el comienzo. No da para abajo.
Te dejo un beso.
Siempre me ha encantado ver la lluvia a través de los cristales.
Max: Mi otro Blog hizo trampa junto a Blogger y se grabó hasta la mitad. Por suerte he sabido qué hacer...
Luna: es el romanticismo que amarras naturalmente...
Hermoso relato. Un tema doloroso tratado muy poéticamente. Me dejó sin palabras.
Besos y abrazos.
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