Dolor Inútil

¡Tanto dolor inútilmente derramado en el cruel juego que el perverso hace del corazón ajeno!
Hecha trizas, partida en veinte mil pedazos, confusa, desamparada, sin esperanza de fusión posible con lo que nunca fué... Me dejo caer abandonada con cada pedacito que se desprende de mi piel.
En la profundidad de cada herida corre el miedo, ventaja de encontrar un sitio donde alojarse. Yo en cambio doy vueltas a tientas por la ciudad buscando salir de la intoxicación que este loco dejó en todo mi ser. Demente cruel, siempre responsable, de cada maldad infinita que supo regalarnos a quienes lo amamos bien. Perverso animal que se nutrió en forma abundante de la sangre amorosa que sus falacias generaron. Continuamente, como un monstruo rapaz revolviendo el alma ajena hasta de las tripas..
Buscador incansable de nuevas presas que mantengan con vida su extraordinario ego narcisista, nunca satisfecho.
Detrás del sentimiento con algunos "Todo puede cambiar", "Empecemos de nuevo", "Démonos una nueva oportunidad", "Estoy enfermo, dame tiempo para curarme...", "ayudame confiando en mi", "Dejame mostrarme que puedo cambiar", "Te mereces lo mejor de mi"...
Frases aprendidas y repetidas por igual a cada una...
Frases traicioneras que en esta mañana desprenden su halo de inseguridad, impotencia y tristeza profunda... Maldad sin límite que en abanico desacreditaba cada mujer que pasaba por sus días: Aquella loca, la otra alcohólica, la de allá puta, ésta de alguna secta, la del costado drogadicta, la del otro costado resentida... mientras el único enfermo era él.
Los seres nobles son su blanco perfecto porque carecen de defensas naturales. Nosotras lo hemos sido. Muchas.
Golpeadas. Lastimadas.
Heridas... Castigadas,
Por haber amado tanto...
Por descubrir el juego del psicótico.
Por decir ¡Basta!
Por protegernos entre nosotras...


BY Abril Lech@